¿Qué puede comer una embarazada? Mantener una buena dieta en el embarazo asegurará que la madre tenga los nutrientes esenciales para ayudar a la formación y el desarrollo saludable del bebé.
El descubrimiento de la llegada de un nuevo miembro a la familia, en general, es un motivo de alegría y de planes. Sin embargo, para que todo vaya bien durante el periodo de espera, es fundamental cuidar la alimentación en el embarazo.
Durante el embarazo, el cuerpo y el organismo de la mujer sufren transformaciones para adaptarse a la generación de otro ser. El aumento de peso, la diabetes gestacional y el aumento de la presión arterial son algunos de los episodios frecuentes en las mujeres en este estado. En este artículo te responderemos ¿Qué puede comer una embarazada?
¿Sabías que la alimentación puede marcar la diferencia y evitar casos como éste? En este post aprenderás qué alimentos pueden y no pueden comer las embarazadas, contribuyendo a un embarazo saludable.
¿Qué tipo de alimentación se recomienda durante el embarazo?
Durante el embarazo, un cuidado especial con la alimentación es lo que contribuye a un embarazo tranquilo e imprevisible. Así, la ingestión de alimentos inadecuados perjudica la salud del bebé y de la madre.
Una dieta rica en nutrientes debe alejarse de ciertos alimentos. No importa si la mujer embarazada es madre por primera, segunda o tercera vez. El hecho es que cuanta más atención se preste a la alimentación durante el embarazo, mejor será para el estado general de la gestación.
¿Qué puede comer una embarazada?
Cada alimento ingerido, una parte se destinará a la nutrición del feto en desarrollo. Así, una mujer embarazada debe consumir 300 calorías.
Por ello, entre los necesarios para nutrir a una mujer embarazada y a su bebé, algunos alimentos son recomendables e incluso imprescindibles a lo largo de los meses de gestación. Comprueba la lista:
· Derivados lácteos: leche desnatada, yogur o queso;
· Frutas: naranja, plátano, pera, papaya, melón, sandía, uvas, mango o manzana;
· Cereales integrales: arroz, pan, pasta, granola o avena;
· Proteínas: carne roja, pollo, pescado, judías, soja, frutos secos o huevos
· Verduras:brócoli, zanahorias, judías verdes, tomates, coliflor o remolacha.
¿Qué debe evitarse durante el embarazo?
Entre los alimentos que deben evitarse durante el embarazo hay varios que causan problemas que pueden afectar a la madre y al bebé, incluso después de la gestación. Ver los alimentos no recomendados:
· Pescado y marisco crudos: fuente nociva del parásito Toxoplasma que puede causar daños cerebrales al feto y ceguera;
· Grandes peces considerados depredadores, en su hábitat – frescos o en conserva, pueden contener niveles de mercurio que ponen en peligro la salud de la madre y del bebé;
· Carnes y pollo crudos o poco hechos – a temperaturas ideales la carne roja debe prepararse a una media de 160 grados y el pollo a 170 grados;
· Leche y quesos blandos no pasteurizados: la posibilidad de la presencia de la bacteria Listeria puede provocar la contaminación. Por lo tanto, puede provocar un aborto espontáneo, un parto prematuro, el nacimiento de un bebé muerto o una enfermedad mortal para el recién nacido;
· Salchichas y embutidos: durante el procesamiento, estos alimentos también pueden contaminarse con listeria;
· Huevos revueltos blandos o poco cocinados: la presencia de la bacteria Salmonella en los huevos crudos puede provocar una intoxicación alimentaria con graves consecuencias para la madre y el niño;
· Alcohol:la sustancia alcohólica puede causar daños al feto, como retraso mental y comportamiento anormal tras el nacimiento.
¿Cuáles son los consejos para seguir una dieta adecuada en el embarazo?
Una buena alimentación durante el embarazo debe seguir una dieta equilibrada, con las raciones adecuadas para que el organismo absorba los nutrientes necesarios para la madre y el bebé.
Por lo tanto, no tiene sentido que la embarazada coma mucho de un alimento y no coma otro más importante.
· Cereales integrales: un mínimo de 6 raciones y un máximo de 11 diarias;
· Derivados de la leche: consumir un mínimo de 3 raciones y un máximo de 4 al día;
· Proteínas: sólo 3 veces al día;
· Verduras: deben consumirse diariamente, un mínimo de 3 porciones y un máximo de 5;
· Fruta: debe ser consumida diariamente, un mínimo de 2 porciones y un máximo de 4.
Sólo hay que tener cuidado al consumir los que están permitidos, observando las calorías presentes en cada alimento para cerrar la media de 300 consumidas al día.
Además, esta rutina debe permanecer incluso después del nacimiento. De este modo, si se alinea con la cantidad de agua (unos 2 litros/día) y la práctica de actividades físicas regulares, los riesgos disminuirán.
No es difícil cuidar la dieta durante el embarazo, siempre que la embarazada sea consciente de la necesidad de llevar una dieta controlada. De este modo, se evitarán problemas en su propia salud y en la de su hijo, para que ambos puedan disfrutar de la compañía del otro con seguridad después del parto.